jueves, 11 de abril de 2019

Article a @ElCinefilCat "La Ciència a Dumbo"

La ciència a Dumbo


El meu article número 73 a la revista virtual "El Cinèfil, la revista de cinema en xarxa i en català" (i gratuïta).

Amb motiu de l'estrena de la pel·lícula Dumbo d'acció real dirigida per Tim Burton, dedico l'article a parlar sobre la ciència present a la pel·lícula, que apareix vista des de diferents vessants .

Teniu l'article al següent enllaç:
http://elcinefil.cat/2019/04/11/La-ciencia-a-dumbo/

Si voleu llegir tots els articles que he publicat a la revista podeu veure el link següent:
http://elcinefil.cat/author/jordiojeda/

Podéis leer el artículo traducido al castellano a continuación:

La ciencia en Dumbo
Cuando las niñas quieren ser científicas
Jordi Ojeda


Si ha llegado a este artículo por su título no espere, evidentemente, que os diga que sí puede volar un elefante como Dumbo. Ni tampoco espere que haga el chiste fácil de decir que sí, que podría volar, pero siempre en vertical y hacia abajo. Antes de continuar leyendo sí quiero hacer una advertencia, es posible que en el texto pueda destripar algún detalle de la trama, que en ningún caso es fundamental para el desenlace final, eso sí. Dicho esto, comentaremos a continuación algunos aspectos relacionados con la ciencia que rezuman a lo largo de la película.

Tal y como decíamos en el artículo Jumbo, el famoso elefante que inspiró Dumbo, la autora Helen Aberson se inspiró en el elefante Jumbo para su cuento, que a su vez sirvió de base para la película de animación de Disney. El original Jumbo era un elefante africano, que se caracteriza por ser más grande que los asiáticos, en cuanto a su envergadura y peso. También tienen las orejas mucho más grandes, de hecho, en la edad adulta puede llegar a tener dos metros cuadrados de superficie cada una (bueno, en realidad los elefantes crecen a lo largo de su vida, aunque a un ritmo más lento cuando llegan a su madurez).

Las orejas de los elefantes tienen una función reguladora de la temperatura corporal: con su aleteo y, gracias a una intrincada red de vasos sanguíneos, pueden llegar a disminuir varios grados la temperatura de la sangre. De hecho, su piel arrugada tiene una función similar: las arrugas hacen aumentar la superficie de la piel, que hace que se mojen mucho más cuando se bañan, mientras que las grietas de las arrugas evitan la evaporación rápida, ayudando a tener más fresco el cuerpo, a diferencia de los mamíferos que tienen la piel lisa.

Un elefante recién nacido pesa entre 100 y 120 kg (las hembras pesan algo menos), después de una gestación de veintidós dos meses, y suelen estar al cuidado de su madre durante los primeros años, muy protectoras de la manada y muy sociables, tal y como se puede apreciar en la película dirigida por Tim Burton. Este peso del bebé es lo que hay que debe salvar Dumbo para poder volar, de hecho, más, si queremos acelerar o subir y bajar. Hay que pensar que una de las aves más grandes del planeta es el cóndor, que puede llegar a pesar 15 kg y tener una envergadura de alas de más de tres metros de ancho, y que, incluso, puede llegar a tener la necesidad de ayuda del viento para poder volar mejor con este peso.

Las aves (y los aviones) vuelan gracias a la tercera ley de Newton, que afirma que con cada acción hay una reacción igual y opuesta. Para aplicar una fuerza ascensional sobre el ala igual o mayor que su propio peso, hay que aplicar sobre el aire una fuerza hacia abajo equivalente empleando justamente el ala. La corriente de aire hacia abajo justo debajo del ala da como resultado el empuje hacia arriba que te permite volar. Cuando mayor es la envergadura del ala mayor es el volumen de aire desplazado y mayor la fuerza ascensional correspondiente.

Las aves no tienen las alas saliendo de la cabeza, como las orejas de Dumbo, ni tampoco les sale de la espalda, como hemos visto muchas veces en la ficción (empezando por el caballo mitológico Pegasus). Las alas de las aves son sus brazos que han evolucionado como alas, con una musculatura adecuada para poder hacer el aleteo generando la fuerza necesaria, y con una estructura ósea ligera y resistente, con un esternón con forma de quilla que le permite soportar la presión del movimiento de cada lado. Así que no, es por todo esto y más que Dumbo no puede volar.

Tampoco hay que confundir la tercera ley de Newton con el efecto Bernoulli, que es lo que vemos en la película de Dumbo (2019), cuando este pasa volando por encima de la grada del circo y hace volar los sombreros del público. En su aleteo con las orejas, el elefante provoca una diferencia de presión en el aire, dejando tras de sí una densidad de aire inferior. Cuando la naturaleza intenta igualar la presión, se provocan estas corrientes de aire tan características cuando vemos pasar un tren o un vehículo a gran velocidad, levantando la polvareda o hojas cercanas.


En la película, cuando los dos jóvenes hermanos descubren por azar la capacidad de volar del elefante (por cierto, después de un estornudo, hay que recordar que tienen unos de los sentidos del olfato más desarrollados del reino animal), la hermana mayor propone aplicar el método científico, emulando a su ídolo: la científica Dra. Marie Curie. El método científico es una metodología para obtener nuevos conocimientos y que consiste en la observación sistemática, la recopilación e interpretación de los datos y la formulación de una hipótesis. Gracias a la perseverancia e ingenio de la chica pueden ayudar, de forma verosímil, al entrenamiento y perfeccionamiento del arte de volar de Dumbo. 

El personaje que interpreta la joven actriz Nico Parker (hija de la actriz Thandie Newton y del director y guionista de cine, Ol Parker), argumenta en varias ocasiones su interés en dedicarse a la ciencia, a imagen y semejanza de la Dra. Marie Curie. Curie fue la primera persona en ganar dos premios Nobel para dos especialidades diferentes, química y física, y la primera persona a la que la Real Academia de las Ciencias de Suecia le desaconsejó que fuera a recoger el galardón. Si quieren saber más, de las varias versiones cinematográficas y de televisión sobre el personaje, recomendamos especialmente la película Marie Curie (2016), interpretada por Karolina Gruszka y escrita y dirigida por Marie Noëlle, donde se destaca su invisibilización por la su condición de inmigrante, por ser la pareja de Pierre Curie y, sobre todo, por el hecho de ser mujer y los prejuicios que ello conlleva, y si no que se lo digan a la academia sueca.

Tim Burton hace su particular homenaje a la científica reservando un espacio dedicado a la Dra. Marie Curie en la feria tecnológica presente en el gran parque de atracciones lleno de actividades de todo tipo, justo donde va a parar Dumbo como estrella de un gran espectáculo, en una carpa más grande y con más proyección mediática que en donde nació.

Este tipo de ferias tecnológicas fueron un reclamo habitual durante décadas en los Estados Unidos (la película acontece en el inicio de los años veinte del siglo XX), y lograron contribuir a realizar un efecto multiplicador para la difusión de las nuevas tecnologías entre la población, a la vez que bajaba las barreras de entrada de los nuevos artefactos caseros, tal y como se puede apreciar en uno de los escaparates de la feria que podemos contemplar en varias ocasiones durante la película, mostrando como puede ser un hogar del futuro.

Desgraciadamente, el progreso científico y tecnológico, tan importante a principios del siglo pasado, tuvo por un instante como protagonista a otra elefante: Topsy. Una elefante asiática que terminó en un parque de atracciones de Nueva York después de varias décadas de penitencia en circos ambulantes, sufriendo todo tipo de penurias. La leyenda habla de que llegó a matar a tres de sus domadores (se dice que por culpa de la crueldad con la que la trataban). Su comportamiento altamente agresivo hizo que el parque decidiera promocionar su muerte en una gigantesca horca, previendo un gran espectáculo multitudinario, ... tal cual.

Cuando esta noticia llegó a los oídos de Thomas Edison hizo otra propuesta. Edison se encontraba en ese momento en plena disputa con Nikola Tesla, que defendía la corriente alterna como la mejor solución tecnológica para el transporte de la electricidad (como así ha sido desde entonces). Edison defendía la corriente continua (a pesar de los problemas evidentes de pérdida de potencia provocados por la ley de Ohm en su distribución). La solución de Tesla se puede explicar de forma simplificada: aumentar el voltaje mediante un transformador permite disminuir las pérdidas a grandes distancias, y, al final del recorrido, sólo hay que volver a bajar el voltaje para su uso definitivo.

Para mostrar el peligro que suponía el voltaje alto, Edison propuso electrocutar a Topsy con una corriente de 6600 voltios. La ejecución tuvo lugar el 4 de enero de 1903 ante unas 1.500 personas, con muchos periodistas cubriendo la noticia para explotar al máximo la intención final de Edison de ganar a Tesla (y todo lo que suponía esto desde un punto de vista industrial). Con el objetivo de dar la máxima publicidad al evento se grabó la ejecución (el vídeo se puede encontrar aún hoy en día en internet), donde se ve como se acerca Topsy a la zona de descarga y como ésta cae fulminada, electrocutada, ante la expectación de los asistentes.

Eso sí, para asegurar el éxito de la ejecución, Topsy había sido envenenada previamente. Es lo que hay cuando el progreso está en manos de personas avariciosas, ... y sin corazón.


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